Los regímenes de precipitación de la España peninsular

En esta entrada se realiza un breve análisis del régimen de precipitación de la España peninsular a partir de la base de datos de precipitación acumulada a nivel mensual MOPREDAScentury, generada en el seno del proyecto CLICES.


El estudio de los regímenes de precipitación es de especial relevancia tanto para comprender el funcionamiento de los sistemas naturales como la dependencia de los recursos de las estructuras socio-económicas. Ligeros cambios en el reparto anual de la pluviometría pueden afectar severamente a la producción agrícola, por ejemplo, los cereales de invierno dependen de las lluvias primaverales, pueden darse problemas en la producción de oliva al reducirse la reserva de agua del suelo durante la durante la estación seca del verano, a los regímenes fluviales, modificando hábitats y ecosistemas de ribera, o al almacenamiento de agua en la red de embalses, generando problemas de abastecimiento, entre otros.

En una entrada anterior hemos presentado la elaboración de la bases de datos en rejilla MOPREDAS_century, que permite a los científicos climáticos llevar a cabo estudios muy variados sobre el clima y su evolución reciente. A partir de la información de precipitación acumulada a nivel mensual del periodo 1916-2015, y agrupándola previamente a escala estacional (invierno -suma de las cantidades recaídas en los meses de diciembre a febrero-, primavera -suma de las cantidades recaídas en los meses de marzo a mayo-, verano -suma de las cantidades recaídas en los meses de junio a agosto- y otoño -suma de las cantidades recaídas en los meses de septiembre a noviembre-), se pueden obtener los regímenes de precipitación de la España peninsular para dicho periodo.

La distribución espacial de la estación más húmeda y del régimen de precipitaciones sobre la España peninsular para el periodo 1916-2015 puede dividirse a grandes rasgos en tres zonas (Figura 1). En el frente norte y la parte suroeste peninsular predominan los regímenes donde el invierno como la estación anual con una mayor pluviometría. Presenta únicamente dos variantes: sub-dominancia del otoño en la parte norte y este, y en una menor extensión, sub-dominancia de la primavera, concentrada mayormente en la parte central. La segunda gran zona se encuentra situada a lo largo de la costa mediterránea, al este de la península, donde el régimen predominante es el otoño. Y la tercera gran zona es una extensa superficie del interior de la Península Ibérica donde predominan los régimenes primaverales, a medio camino entre las dos zonas anteriormente mencionadas y con un gradiente entre las estaciones sub-dominantes que van del invierno al otoño según se sitúen hacia el interior peninsular o hacia la costa mediterránea, lo que le hace recoger un gran número de variantes. Por último, cabe destacar la existencia de dos pequeños reductos con máximos estivales en los Pirineos orientales y los montes de Teruel relacionados con factores locales y de actividad convectiva.

Figura 1. Regímenes de precipitación de la España peninsular obtenidos para el promedio de las cantidades recogidas en el periodo 1916-2015: a) estación dominante (estación con mayor contribución al total anual) y b) regímenes de precipitación (orden de contribución estacional al total anual).Win, invierno; Spr, primavera; Sum, verano; Aut, otoño.

La proporción de esta distribución de las cantidades de precipitación recaídas a lo largo del año no es constante en el tiempo, pues al ser esta una variable climática que presenta una elevada irregularidad inter-anual hay grandes fluctuaciones entre cortos periodos temporales, tal y como se puede apreciar en la Figura 2.

Figura 2. Regímenes de precipitación de la España peninsular del periodo 1915-2015 calculados por decenios. Simbología de acuerdo a la Figura 1ii.

Atendiendo a una división temporal más amplia, analizando el conjunto de datos reunidos en 4 periodos de 25 años cada uno (cercanos a la clásica amplitud de las ventanas normales de 30 años de duración), se puede apreciar una importante fluctuación de

La figura 3 muestra la distribución espacial de las estaciones dominantes en cuatro subperiodos y las superficies ocupadas por cada uno de ellos, especificando la migración a lo largo del tiempo entre las distintas categorías. Como muestran los cuatro mapas, la estacionalidad de las precipitaciones ha sufrido cambios muy llamativos durante el periodo de estudio, especialmente en el paso del primer al segundo periodo y, sobre todo, entre el penúltimo y el último periodo, siendo los 50 años centrales los que presentaron una mayor estabilidad. El análisis de la figura evidencia que los cambios en el régimen pluviométrico afectaron sobre todo a las zonas del interior, es decir, la zona de transición entre un área dominada por las precipitaciones invernales, situada al oeste, y la zona dominada por las lluvias de otoño, situada a lo largo del arco mediterráneo. Entre 1916-1940 y 1941-1965, el 14,8% de la superficie en régimen otoñal cambió a primaveral en la cuenca del Ebro, y en menor medida a invierno (3,8%), sobre todo en las cuencas meridionales del Tajo y el Guadiana. Como cambios menores, destaca paso del 4,8% de la superficie primaveral a un régimen invernal. Los cambios más notables entre 1941-1965 y 1966-1990 fueron el paso del porcentaje de 9,7% de primavera en favor del invierno, en el norte de la cuenca del Duero, y el otoño (4,1%). Por último, las transiciones entre los periodos 1966-1990 y 1991-2015 muestran un notable aumento del porcentaje de superficie del régimen otoñal, y esto se consigue especialmente a expensas de la primavera (11,1%) hacia el noreste (cuenca del Ebro), pero sobre todo el retroceso del invierno (26,7%) a las zonas interiores occidentales (cuencas del Duero, Tajo y Guadiana). En consecuencia, el otoño fue la estación dominante en cuanto a precipitaciones en el último periodo.

Figura 3. Evolución de los regímenes de precipitación, representados solamente como la estación dominante, sobre la España peninsular durante cuatro periodos de 25 años entre 1916 y 2015. Se muestra en términos espaciales (centro de la imagen) y en términos cuantitativos, como porcentaje de ocupación respecto al total de la rejilla (arriba, migraciones entre los cuatro periodos; abajo, migración entre el periodo inicial y final).

En resumen, el cambio más notable en los regímenes de precipitación de la España peninsular durante el periodo 1916-2015 es la transición de un predominio de la estación invernal en la mayor parte de su superficie, complementado con la primavera, hacia una situación dominada por el otoño, y el invierno en segundo lugar, principalmente en el interior del área de estudio.


Si te interesa acceder a los datos utilizados en esta entrada, hemos puesto enlaces a los mismos debajo de cada figura. Si utilizas los datos, no olvides citar la fuente:

  • Beguería, S.; Peña-Angulo, D.; Trullenque-Blanco, V.; González-Hidalgo, J.C.; 2023; MOPREDAScentury: a long-term monthly precipitation grid for the Spanish mainland v.1.0.0 [Dataset]; DOI: 10.20350/digitalCSIC/16245.

Si te interesa saber más sobre el análisis de los regímenes de precipitación en la España peninsular puedes consultar los siguientes artículos:

  • González-Hidalgo JC, Trullenque-Blanco V, Beguería S, Peña-Angulo D (2024) Seasonal precipitation changes in the western Mediterranean Basin: The case of the Spanish mainland, 1916–2015, 44(5): 1800-1815. DOI: 10.1002/joc.8412.

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